La terapia ocupacional es la encargada de evaluar las habilidades y destrezas de los niños, con el fin de potenciar aquello que se encuentra ausente o alterado buscando la independencia, la participación en el entorno, la prevención de discapacidades y la mejora de la calidad de vida del niño.
Para ello la terapia ocupacional ofrece actividades a través del juego que les ayudará a alcanzar un alto grado de autoestima y autorrealización y se encarga de brindar prevención, diagnóstico y tratamiento en las diferentes áreas de la vida cotidiana: cuidado personal (alimentación, baño, higiene), productividad (tareas y actividades preescolares y escolares), juegos y ocio, incluyendo la adaptación y participación activa en entornos sociales.
La Terapia Ocupacional en edades tempranas tiene como objetivo principal brindar al niño/a las herramientas básicas del aprendizaje, generando unos cimientos fundamentales para el desarrollo de nuevas destrezas y habilidades: motrices, sensoriales, autonomía e independencia en tareas de la vida diaria, perceptivo-cognitivas y socio-afectivas.
El objetivo del terapeuta ocupacional en Atención temprana es maximizar el potencial individual de cada niño/a en su domicilio, en la escuela y en su juego, ofreciendo herramientas básicas del aprendizaje para que generen las bases necesarias en el desarrollo de nuevas destrezas y habilidades.
La Terapia Ocupacional basada en el enfoque de la integración sensorial se lleva a cabo mediante actividades divertidas, significativas e internamente motivantes para la persona. Se trata de una intervención que incluye múltiples estímulos sensorio-motores en el contexto de retos adaptados a cada individuo. Para un niño representa una sesión de juego divertido. Para el terapeuta ocupacional representa un complejo ejercicio de razonamiento clínico basado en amplios conocimientos neurológicos.
El trabajo en integración sensorial permite una participación ocupacional más eficiente en el hogar, la escuela y la comunidad.